Hace un par de meses, el Twitter chino, la red social Weibo, posteó como quien no quiere la cosa una serie de fotografías de quien hasta entonces era un completo desconocido: Tao Liu, un empleado del servicio de agua de la ciudad provinciana de Hefei.

Las fotos de Tao explotaron en la red social. En poco más de un día fueron compartidas más de 40,000 veces, y el fotógrafo se convirtió en una sensación instantánea y una celebridad.

Y la verdad es que no es para menos. Aprovechando sus rondas como medidor de agua en la ciudad, Tao, que recorre las calles a bordo de una bicicleta y con una cámara Fujifilm x100 siempre lista, aprovecha sus ratos libres y sus horas de almuerzo para retratar escenas comunes de la vida en la ciudad (que no se cuenta ente las más grandes y desarrolladas de China, pero sí es una que ha venido sufriendo significativas transformaciones en los últimos años). Pero lo hace con un fino y discreto sentido del humor, con ironía amable pero punzante, y sus fotos han encontrado inmediata resonancia entre sus compatriotas.

El fotógrafo es autodidacta y, según reporta la revista Time, no tiene planes de abandonar su puesto y dedicarse profesionalmente a esta nueva labor, aprovechando la fama ganada. Lo que no quiere, dice, es dejar las calles. 

Aquí va una muestra de sus instantáneas, que me han hecho desear ver muchas más.